El comercio de la nieve y el hielo, constituyó un verdadero empuje económico, ampliando las posibilidades de trabajo de la población.
La nieve y el hielo, eran necesarios para fines culinarios, de conservación e incluso médicos.
Durante los siglos XVII, XVIII y XIX, crece la utilización de la nieve y el hielo, curiosamente es en la vertiente Mediterránea donde cobra más popularidad, obligando a buscar medios de almacenamiento para este preciado bien.
Se construyeron (habitualmente en las montañas), pozos y ventisqueros (un muro en forma de herradura que evitaba que el azote del viento deshiciera la nieve).
A fin de abastecer a la población, la nieve se bajaba a las ciudades de noche, mediante el uso de caballerías provistas de serones de esparto.
Aunque esta actividad desapareció como consecuencia de la fabricación de forma artificial del frio, todavía hoy podemos contemplar en muchas de nuestras montañas, los restos de lo que fue el Comercio de la Nieve y el Hielo.
Nos desplazamos a la población de Agres, para realizar la visita a varias "Cavas" (pozos de nieve), que nos darán una idea del impacto que tuvo este comercio en la Sierra de Mariola.
Cava Coloma (Font Roja).
Cava de Sant Blai (Bocairent), una de las pocas ubicadas en la población.
Nevera Cim de la Xafor.
Nevera de Aitana.
Nevera del Benicadell.
Nevera del Pla de la Casa.
Ventisquero de la Bellida.
Datos generales:
(Método Mide - Montañas Seguras).
Descripción de la ruta:
(Fuente Wikiloc - Montaña para todas las edades).
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La ruta empieza en el Santuario de la Virgen de Agres. Situado en la parte alta de Agres. Tomamos este camino asfaltado que se dirige hacia la Sierra.
Una de las muchas fuentes que hay en las inmediaciones del Santuario.
Nos detenemos ante este panel informativo, donde observamos nuestro recorrido.
Descartamos esta entrada que sale por la izquierda. Vamos siguiendo las señales blancas y amarillas del PR (sendero de corto recorrido), y la señalización horizontal de Parcs Naturals con indicativo verde.
Poco a poco vamos ganando altura y abandonando las instalaciones del Santuario.
Agres.
La señalización es abundante y clara.
Detalle señalización vertical.
Un nuevo panel informativo.
Es temprano y todavía hace frío. Mas tarde nos molestará todo.
Descartamos la senda que baja por la izquierda. Como puede apreciarse la señalización es abundante.
El sendero pasa junto a las ruinas del Santuario. Me llama la atención la enorme grieta que presenta el muro de la derecha.
Seguimos el sendero por esta estrecha "grada", sin hacer caso del sendero que sale por la derecha.
Mientras vamos remontando este pequeño barranco, mil aromas embriagan nuestros sentidos; Mariola cuenta con una amplia gama de platas (muchas de ellas tienen usos medicinales).
Recuerdo con cariño un día en que después de dormir en el refugio, fuimos aprovechando la bajada hasta Agres, para recolectar muestras de las plantas que íbamos encontrando por el camino (una compañera estudiante de farmacia, necesitaba hace un trabajo).
Al llegar al Santuario, un señor bastante mayor, nos quitó la bolsa de las manos, sin mediar palabra, y comenzó a sacar una a una todas las muestras que habíamos cogido, al tiempo que decía:
- Esta no sirve para nada.
- Esta es venenosa.
- Esta... a la basura.
Ante nuestro asombro, nos explicó que era gran conocedor de las plantas de la sierra y que incluso las recolectaba con fines medicinales. Al explicarle que eran para un trabajo, no dudó en ofrecer sus servicios desinteresados a nuestra compañera, quien una semana más tarde volvió a casa de este señor, para ahora sí, recoger unas muestras excelentes y terminar un magnífico trabajo.
Descartamos esta senda que sale por la izquierda. Se está intentando regenerar la zona, por lo que es de agradecer que no se abandone la senda principal.
Llama la atención la limpieza del lugar.
El Benicadell.
Mientras ascendemos, vamos contemplando este hermoso bosque de pinos.
Encontramos los primeros erizones Echinospartum horridum signo inequívoco de que ya estamos cerca de los mil metros.
La senda atraviesa una pista, que descartamos. Al entrar en la pista, caminamos unos metros por ella hacia la izquierda, para inmediatamente seguir el sendero por la derecha.
Detalle de entrada a la pista.
Abandonamos rápidamente la pista para seguir el sendero por la derecha. Si siguiéramos la pista iríamos hacia la teixera (en Agres se encuentra el bosque de tejos más meridional de Europa). Lo tendremos que dejar para otra ocasión.
Esta parte es la que presenta mayor pendiente.
A medida que ganamos altura, las vistas son fascinantes.
Ya vemos el refugio del Centro Excusionista de Alcoy, lo que indica que estamos cerca de alcanzar la parte más alta de nuestra ruta.
Este tramo es un poco incómodo, pero es muy corto y se supera rápido.
Ahora comienza la segunda parte de la ruta, la visita a las Cavas. La primera, la Cava de l´Habitacio, se encuentra a escasos metros del refugio. Nos desviamos unos metros por la pista que sale delante del refugio (izquierda) y en unos metros podremos disfrutar de la cava.
Cava de l´Habitacio (exterior).
E interior. Después de visitarla regresamos al refugio.
Pasamos junto al refugio y seguimos unos metros por la pista.
Tomamos la pista de la izquierda.
Es una lástima que no se reponga la información del panel.
Seguimos por la derecha.
Al frente la Cava Arquejada. Una visión que acelera nuestro paso y nuestro corazón.
De reciente rehabilitación, la Cava Arquejada se nos presenta con todo su esplendor.
De camino al túnel acceso.
Soporte de la cúpula desde la planta inferior.
Escalera de acceso.
Un buen lugar para almorzar.
Aprovechamos el almuerzo y el lugar, para seguir con unas pequeñas pinceladas de formación, familiarizándonos con el manejo del mapa y la brújula.
Sin duda, la imagen más fotografiada y representativa.... El Montcabrer y la Cava Arquejada.
Vista de la planta inferior, con su característico tejo.
Es hora de seguir nuestra ruta, Continuamos por la pista que bordea la Cava.
Ahora vamos en busca de la Cava del Buitre.
De nuevo el Montcabrer.
Descartamos esta pista por la derecha.
Encontrar el desvío (por la derecha), para la Cava del Buitre, es algo que va a requerir un poco de atención. Justo cuando la pista comienza a bajar y termina la arboleda (antes de una curva a izquierda), hay una pequeña pista, que en unos metros nos llevará hasta la Cava del Buitre. Después de la visita tendremos que regresar a este punto.
Camino a la Cava del Buitre.
Detalle del interior. Regresamos a la pista principal.
Justo en la curva que antes mencionaba, tomamos la senda que sale por la derecha (hay hitos).
Hitos de piedra señalizando el camino.
Estos pasos le dan el "puntito aventurero" a la ruta.
La senda termina en esta senda más ancha que seguimos por la derecha (descartamos el desvío de la izquierda).
De nuevo seguimos por la derecha.
El camino ahora es más cómodo y volvemos a meternos en el bosque.
Cualquier parada, es aprovechada para admirar el paisaje.
Seguimos ahora por la izquierda.
Y a los pocos metros tomamos la pista que sube por la izquierda.
Sólo se escucha el canto de los pájaros y el sonido que produce el viento al mover las ramas de los árboles.
Llegamos a estas ruinas que bordeamos por la izquierda (estamos cerca del Alto de la Cava).
Vamos a entrar en una microreserva de flora.
Disfrutamos de este fantástico mirador natural.
Erizones en flor Echinospartum horridum.
La montaña de la Cova Alta, en el cercano Valle de Albaida.
Mientras descendemos, No podemos dejar de mirar la última Cava que visitaremos... La Cava de Don Miquel que, a modo de infranqueable fortificación guía nuestras miradas y nuestros pasos.
Detalle del sendero con la Cava de Don Miquel al fondo.
La primavera se manifiesta con toda su belleza.
Nos apresuramos a descubrir la Cava de Don Miquel. Después de la visita, regresaremos a este punto para continuar nuestro camino hacia el refugio Zamorano, muy cerca del final de nuestra ruta.
Parece una fortaleza infranqueable.
Interior de la Cava de Don Miquel. A diferencia de las anteriores, no se encuentra excavada bajo tierra, por lo que creemos que los anchos muros que la forman, cumplían la función de regular la temperatura del interior a modo de termo.
Algunos buitres levantan el vuelo cerca de nosotros.
Es hora de seguir nuestro camino, por lo que regresamos a la banderola, para seguir el sendero por nuestra izquierda. Aprovecho para saludar a unos buenos montañeros de Elda, con los que coincidimos en este punto y tuvimos una charla muy amena y enriquecedora.
Nuestro camino (Refugio Zamorano).
Mientras caminamos, disfrutamos de las vistas.
A los pocos minutos, la senda termina en esta pista que seguimos por la derecha.
El Benicadell.
El camino es muy agradable. Quizá la proximidad al final de la ruta hace que relajemos un poco nuestros pasos.
Foto familiar.
Giramos a la izquierda (Hay que estar atentos, en estos momentos en que vas más relajado inexplicablemente todo indica que se debe seguir recto. A nosotros nos pasó y tuvimos que regresar).
¿Paso de peatones?.
Este tramo se hace un poco largo, tienes referencia visual de lo que te queda....
Pasamos junto al refugio Zamorano.
Tomamos la carretera por la derecha (dirección Agres).
Y ahora por la izquierda.
En el Santuario hay un restaurante (El Convent 966 28 80 50 - 664 49 64 03. Los martes cerrado excepto festivos).
Ahora sólo hay que seguir unos metros por la derecha y estaremos en el Santuario.
Hoy hemos aprendido que:
- No siempre las neveras enfriaban con electricidad, y que la gente se tuvo que adaptar para poder conservar los alimentos frescos e incluso para tener helados y granizados.
- Que se puede orientar un mapa, con ayuda de una brújula, para de esta manera poder localizar correctamente los puntos sobre el mapa.
- También a leer los grados en la brújula.
Recomendaciones especiales:
Llevar ropa y calzado adecuados a la época del año y la actividad a realizar (en invierno las temperaturas suelen bajar de los 0ºC y en ocasiones nieva).
Hay agua en el Santuario y en la Cava Arquejada, pero es conveniente no contar con ellas, pues en ocasiones son estacionales.
Agres cuenta con bares, restaurantes, casas rurales y centro médico.
Enlaces de interés:
Hola Jose Vicente...
ResponderEliminarMuy buena entrada,esta de las Cavas de Mariola.Son unas construcciones que siguen sorprendiéndome y hay que ver el gran papel que desempeñaron en su día.es una lastima que halla algunas en estado de completa ruina,aunque afortunadamente,otras las han rehabilitado.
Una ruta muy atractiva y de la que tomo buena nota...
Un abrazo.
Que tal Juane...
EliminarPersonalmente me encantan los pozos de nieve y todo lo que tenga que ver con el comercio de la nieve y el hielo. Tengo un proyecto personal que consiste en ir recorriendo los distintos pozos de nieve de la comunidad. He subido un pequeño ejemplo, pero en un futuro dedicaré un post a la recopilación de todos los pozos que he ido visitando.
Mariola tiene muchas posibilidades que hay que aprovechar.
Gracias y un gran abrazo.
¡Hola José Vicente! Excelente ruta que reúne esas bonitas y curiosas cavas que tan buen servicio hicieron en su día. Menos mal que en la actualidad obtenemos el hielo de manera artificial, porque si tuviéramos que depender de lo que nieva por estos lares... No había vista la fehabilitación de la Cava Arquejada. La última vez que estuve por allí estaban con andamios y cerrada. Ha quedado muy bien. Me alegra ver iniciativas de ese tipo. El patrimonio cultural deber ser cuidado. Bonita ruta y formando senderistas jóvenes. Excelente labor también.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Emilio! Yo también la recuerdo con los andamios, y encima ese día había niebla, dándole un aspecto más fantasmagórico. Reconozco que ha quedado genial y habilitar el acceso al interior, fantástico.
EliminarMenos mal (como bien apuntas), que no tenemos que depender de lo que nieva.
Un abrazo y gracias.
Hola me parece la ruta muy bonita, cuantas horas se tarda??? Puedo ir con niños??? Muchas gracias
ResponderEliminarHola Gemma:
ResponderEliminarCada uno sabe como reaccionan sus hijos. Los dos primeros kilómetros tienen bastante pendiente y es posible que se les pueda "atragantar" a los niños más pequeños.
A nosotros, con un niño de 10 años (habituado a caminar por la montaña), nos costó cuatro horas y media, con paradas incluidas.
Ya contarás.
Un abrazo
Genial todo. Fotos; indicaciones, las flechas; etc. Este jueves quiero subir.
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