Por los Amanaderos de Riodeva

Bonita ruta, que nos llevará a contemplar los fantásticos saltos de agua de la Rambla de Amanaderos. Un lugar mágico de aguas cristalinas, donde el murmullo del agua inundará todos nuestros sentidos.

Datos generales:

Para llegar al inicio de la ruta, hay que salir de la población de Riodeva, y siguiendo las indicaciones de Amanaderos, llegamos a una zona (después de unos 6 km de sinuosa pista forestal), con paneles informativos donde aparcamos el vehículo.

Podéis descargar la ruta en coche pinchando aquí

(Fuente IGN).

Desde Riodeva, seguimos las indicaciones "Amanaderos"

Dejamos la carretera asfaltada y tomamos la pista de tierra (apta para vehículos normales – Noviembre 2014).

Detalle del recorrido en vehículo (fuente IGN).

Perfil del recorrido en coche (Fuente Wikiloc - Montaña para todas las edades).

Tipo de ruta: Circular.

Firme: Senda. Hay al principio un tramo de escaleras. Para llegar al salto de las Polainas, hay que vadear varias veces el rio.

Desnivel acumulado de subida: 104 m.

Duración de la ruta: Una hora y treinta y cinco minutos (los horarios son orientativos, dependerá de la edad de los participantes y el grupo).

Edad recomendada: A partir de 6 años.

Cobertura de redes móviles: No hay prácticamente cobertura.

Recomendaciones especiales: Podéis descargar la ruta pinchando aquí.

Aunque el agua de Amanaderos, nace unos metros arriba del aparcamiento (por lo que podríamos considerar que se puede beber), es conveniente llevar agua para toda la actividad.

Hay bastante sombra.

Llevar ropa y calzado adecuados a la época del año y actividad.

Los saltos de agua tienen bastante altura (entre 9 m. y 48 m.), por lo que hemos de extremar la precaución y no abandonar la senda y miradores.

Hay que vadear el rio en varias ocasiones (pasando sobre piedras estratégicamente colocadas). Aunque no plantean difigultad alguna, es fácil resbalar y caer al agua (suele haber muy poco caudal).

Descripción de la ruta:

Detalle de la ruta (Fuente IGN).

 

Perfil de la ruta (Fuente Wikiloc - Montaña para todas las edades).

 Detalle del Panel Informativo (Fuente: Juan José Barragán, autor de los contenidos e imágenes).

Detalle del Panel Informativo (Fuente: Juan José Barragán, autor de los contenidos e imágenes). Aunque se puede continuar, nosotros  terminamos la ruta en el salto de la Polaina y regresamos por el GR-8.

Cualquier momento es bueno para un poco de gimnasia.

Desde los paneles informativos, vemos a mano derecha, la barandilla de madera que conduce al primer salto de agua del día (Salto de las Yegüas, de 22 m).

Ahora sólo tenemos que ir siguiendo el descenso del rio. Al fondo un nuevo mirador

Se accede a la parte inferior por estas escalinatas (algo incómodas), pero que de no existir nos privarían de conocer estos rincones tan maravillosos.

El agua nos atrae una y otra vez.

Continuamos bajando.

Este tramo (bastante empinado), se salva mejor descendiendo de cara a la pendiente.

Cascada de las Ninfas (24 m.).

Tramo de escaleras que hemos descendido.

La senda continúa paralela al rio (a nuestra derecha). 

El Otoño muestra su cara más amable.

El agua y los niños.... Siempre muestran admiración.

Ahora enlazamos con el GR-8 (nosotros seguimos dirección Riodeva).

Siguiendo las marcas rojas y blancas, pronto llegamos al primer vadeo del rio.

A pesar de estar en Otoño, el día es estupendo.

Nuevo vadeo del rio.

En esta parte de sendero, atravesamos esta pedrera. Aunque la senda esta firme, hay que tener precaución con los niños.

En este punto, nos desviamos por la derecha para visitar el salto de la Polaina. Fin de nuestra visita.

Salto de la Polaina.

Regresamos por donde hemos venido hasta el poste señalizador.  Nosotros ahora, seguimos dirección Camarena de la Sierra (es el mismo camino de ida hasta el último vadeo de rio).

El GR, nos va alejando del rio (que queda a nuestra izquierda). Continuamos siguiendo la dirección Camarena de la Sierra (hay marcas más que suficientes y claras).

Termina en el aparcamiento evitando el tramo de escaleras.

Otra opción es regresar remontando el cauce del rio (por donde hemos bajado).